Vive Familia Fundación se acoge a los lineamientos establecidos por la ONU (S.F.) sobre el voluntariado. Que lo define como “un importante vehículo para el desarrollo sostenible». Permite a las personas y comunidades participar en su propio crecimiento. Los ciudadanos construyen su propia resiliencia, amplían su conocimiento básico y adquieren un sentido de la responsabilidad para sus propias comunidades. También afirma que “El voluntariado consolida la cohesión social y la confianza al promover acciones individuales y colectivas, lo que conlleva efectos sostenibles para las personas mediante las personas. El voluntariado es una vía poderosa para que cada vez más gente se una a una causa”.
Para la Fundación, el voluntariado es un modo de ser, una opción libremente elegida, en la que una persona contribuye con el mejoramiento de la calidad de vida de una familia. Es un medio que les permite tener un contacto directo con la realidad que se desea transformar. Es un ejercicio de ciudadanía y de participación que adquiere su significado desde el valor de la solidaridad.
El voluntario es un reflejo de la calidad del recurso humano comprometido con el propósito institucional y tiene una absoluta afinidad entre los anhelos personales y la causa liderada por la misma. Ofrece energía, capacidades, su tiempo y, eventualmente, los medios de que dispone, como respuesta creativa a las necesidades de las familias. Son el corazón y la conciencia crítica de la Fundación.
Para alcanzar los propósitos, el voluntariado ha sido fundamental y por esto queremos que más personas “crean” en lo que creemos: que fortalecer a la familia como célula fundamental de la sociedad, impacta en el desarrollo y bienestar de toda una comunidad.
Ya sea acompañando a las familias, formando niños, acompañando la gestión de recursos o aportando su experiencia profesional en el fortalecimiento de la organización, el voluntariado es y seguirá siendo el “motor” que impulse nuestro trabajo por “una familia mejor, para una sociedad mejor”.